El packaging, el envase o los colores de la etiqueta son la carta de presentación de los productos en general y la apariencia es lo que, muchas veces, nos empuja a tomar la decisión de comprarlos o no.
¿Pero, realmente debemos guiarnos por esta primera impresión? ¿Es suficiente con que el producto sea bonito o debo preocuparme un poco más por saber qué estoy consumiendo?

La etiqueta nutricional forma parte del producto, pero no le prestamos la atención que se merece y muchas veces no sabemos cómo interpretarla. Por eso desde Freefood queremos ayudarte para que tu próxima compra sea 100% responsable.

¿Qué es una etiqueta nutricional?

Es la información sobre el aporte energético (calórico) y contenido de nutrientes que aparece en las etiquetas de los alimentos y bebidas. Todo alimento que haya sufrido algún tipo de transformación debe llevarla de forma obligatoria.

En general, la información debe aparecer en este orden:

1. El valor energético.
2. Cantidad de grasas.
3. Cantidad de grasas saturadas.
4. Hidratos de carbono.
5. Azúcares.
6. Proteínas.
7. Sal.

Hay alimentos que también incluyen las grasas monoinsaturadas, grasas poliinsaturadas, polialcoholes, almidón, fibra alimentaria, vitaminas y minerales.

Ahora que ya tienes la información básica, vamos a desgranar cada concepto para que tengas claro qué significa.

  • Lista de ingredientes: va de mayor a menor según la cantidad de ese ingrediente en el total. Es decir, el primer ingrediente de la lista es el que tiene mayor proporción en el producto.
  • Porción: la información que aparece está basada en una porción/medida. Un producto puede contener más de una porción.
  • Ingesta diaria recomendada o IR: se expresa en porcentaje y se calcula según el aporte recomendado de los diferentes nutrientes del producto que necesitaría una persona adulta.
  • Fecha de caducidad: nos sirve para saber hasta cuándo nuestro producto es apto para el consumo.
  • Forma de conservación: indica cómo debemos conservar el producto para que mantenga sus propiedades y no se eche a perder. Puede ser refrigerado, a temperatura ambiente, en un lugar seco…

Sabiendo todo esto, en tus próximas compras te recomendamos que elijas alimentos:

1. Bajos en azúcares simples, grasas saturadas, sodio y aditivos alimentarios, ya que están vinculados a enfermedades como la diabetes, la hipertensión arterial, la obesidad y el aumento del colesterol.

2. Altos en hidratos de carbono complejos, grasas mono y poliinsaturadas, fibra, vitaminas y minerales porque favorecen una nutrición equilibrada.

Esta es una recomendación en términos generales, sabemos que hay muchos tipos de alimentación. Si sigues una específica –vegana, keto, paleo…–, consulta con un nutricionista qué alimentos son los más idóneos para ti y para el tipo de dieta que quieres seguir.

Ya estás listo/a para hacer tu compra saludable. En el eco market de Freefood encontrarás productos libres de gluten y ecológicos.
Además, añade a tu dieta alimentos sin etiquetado y con packaging natural como frutas y verduras eco y de proximidad.