Muy buenas…. Aquí te dejo una receta de una tarta salada de remolacha que está muy buena. Es ideal para compartir, para llevar de picnic o simplemente porque te apetece comerla. El sábado pasado la llevamos a un cumpleaños y puedo afirmar que tuvo gran éxito.
La remolacha es una raíz muy recomendable aunque hay que consumirla con moderación por su alto contenido en carbohidratos, azúcares. Lo ideal es unas dos veces por semana. Su sabor a tierra y dulzón hacen de ellas un manjar para mucha gente, además de aportar multitud de beneficios. El que destaca más y más conocido es su alto contenido en hierro, muy beneficioso para las mujeres, y sobretodo para estados de máximo ejercicio físico. Combate la inflamación, anticancerigena, y fortalece el sistema inmunologico, entre muchísimos otros beneficio.
Es una tarta salada sencilla que en cuanto cojas el truquillo puedes ir sustituyendo las verduras y hacerte la tuya propia. Ya verás que te va a encantar.
Ingredientes:
– 3 remolachas
(la parte de la raíz, en caso que compres un manojo, no tires las hojas. Puedes utilizarlas para preparar batidos, licuados o una tortilla, igual como si se trataran de espinacas o acelgas)
– 2 cebollas grandes (Figueras si es su temporada)
– 3 zanahorias ralladas o picadas
– 4 Huevos
– 4 cucharadas soperas de harina de sarraceno o 75g
– 1 bote de crema de leche de arroz o de mijo
–semillas de sésamo para decorar
– sal
– Aceite de oliva
-pimienta
– nuez moscada
Proceso:
1. Enciende el horno a 180°C (por arriba y por abajo).
2. Pela y corta en juliana (medias lunas) la cebolla y pocha en una sartén con un chorro de aceite de oliva generoso. Baja el fuego y deja pochar poco a poco.
3. Mientras tanto hornea la remolacha entera y sin pelar unos 10 minutos. Y pica o ralla las zanahorias, reserva.
4. Añade las zanahoria a la cebolla y mezcla.
5. Saca del horno la remolacha (no apagues el horno), pela, ya verás que es muy sencillo, y corta en rebanadas finas. Añade al resto de verduras. Deja unos 2 minutos y apaga el fuego.
6. En un bol grande, bate los huevos, añade la crema de leche vegetal, una pizca de nuez moscada, 1/2 cucharadita de café de sal, una pizca de pimienta y bate hasta que quede bien mezclado. Añade la harina de sarraceno y vuelve a batir. Este proceso lo puedes hacer perfectamente con una procesadora o a mano con un tenedor o unas varillas.
7. Vuelca las verduras en la masa y envuelve la masa hasta que todos los ingredientes queden bien mezclados.
8. Forra con un papel de horno una bandeja apta para horno. Sirven los típicos moldes redondos para tartas. Añade la masa, aplana con la ayuda de una espátula y decora con semillas de sésamo.
9. Hornea de 20-30 minutos. Y…. A DISFRUTAR!!!
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